Sumar una piscina al patio trasero es un proyecto de mejoras para el hogar bastante popular. Muchos propietarios sueñan con relajarse en el agua, organizar reuniones y sentarse junto a la piscina los días soleados. Una piscina también puede añadir entre un 5 % y un 8 % de valor a una vivienda.1
Contar con un plan detallado sirve para garantizar que la instalación de la piscina se realice sin contratiempos. A continuación, compartimos una práctica lista de verificación con los propietarios dispuestos a zambullirse en la aventura:
Permisos necesarios: para instalar una piscina, en la mayoría de los estados, se necesitan permisos relacionados con la excavación, la planificación del terreno, la construcción y la zonificación.2 Las normas específicas pueden variar de un municipio a otro. Un contratista de piscinas con experiencia puede ayudarte a obtener todos los permisos necesarios antes de iniciar la construcción.
Materiales: los materiales más comunes para las piscinas son el vinilo, el hormigón y la fibra de vidrio. Las piscinas de vinilo suelen ser las más accesibles y rápidas de instalar, pero, por lo general, su revestimiento tiene que cambiarse cada 6 o 10 años.3 Las piscinas de hormigón y fibra de vidrio ofrecen una mayor durabilidad y tienen una vida útil de más de 20 años.
Opciones de diseño: la instalación de una piscina elevada puede costar menos que la de una enterrada, pero esta última suele ser más agradable a la vista. Las piscinas enterradas también se pueden personalizar para adaptarlas a un paisaje o uso específicos, como los largos de natación. Las piscinas de hormigón ofrecen la máxima personalización en comparación con las piscinas de fibra de vidrio, que vienen prefabricadas en una selección limitada de formas y tamaños.
Sostenibilidad: un contratista de piscinas puede ayudarte a elegir el equipo adecuado para reducir el consumo energético de tu piscina. Por ejemplo, las nuevas bombas de piscina de velocidad variable consumen mucha menos energía que las bombas tradicionales. Instalar la fontanería adecuada puede garantizar que el agua de la piscina se desplace con la mayor eficacia posible. Además, los paneles solares pueden ayudar a calentar el agua de la piscina por una fracción del costo de la electricidad.
Agua dulce o salada: las piscinas de agua salada son cada vez más populares. En lugar de los tradicionales gránulos o pastillas de cloro, usan generadores de sal para desinfectar el agua. Si bien la instalación de las piscinas de agua salada suele costar entre 1500 y 2500 dólares más,4 ofrecen una experiencia más natural y sin cloro.
Vallado obligatorio: la instalación del vallado alrededor de la piscina es esencial para proteger a los niños pequeños de ahogamientos accidentales. Si bien no existen leyes federales sobre el vallado de piscinas, muchos estados elaboraron sus propias normas. Para ayudar a los propietarios a considerar las distintas opciones, incluido el tipo de valla que deben instalar, la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos creó Safety Barrier Guidelines for Residential Pools.
Mantenimiento continuo: es importante tener en cuenta el mantenimiento continuo de la piscina, que incluye la apertura y el cierre, la limpieza y los tratamientos químicos. Un buen contratista puede brindarte las herramientas necesarias para mantener tu piscina en buen estado, así como ofrecerte mantenimiento y asistencia continuos.
Para muchos propietarios, los beneficios de instalar una piscina no tienen precio: puede mejorar el estilo de vida y el disfrute del hogar al fomentar la salud, el ejercicio físico y la relajación.
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